miércoles, 17 de septiembre de 2025

Ciclo PHVA

 El PHVA (Planificar-Hacer-Verificar-Actuar) es un ciclo de mejora continua, también conocido como Ciclo de Deming o Ciclo de Shewhart. Es una metodología iterativa de cuatro pasos utilizada para controlar y mejorar continuamente los procesos y productos de una organización.

Su poder reside en su simplicidad y en ser un ciclo repetitivo: una vez que se completa la última etapa (Actuar), se vuelve a la primera (Planificar) con el conocimiento adquirido, iniciando una nueva vuelta de mejora.

Las 4 Etapas del Ciclo PHVA

Aquí te explico cada etapa en detalle:

1. P - Planificar (Plan)

  • Objetivo: Establecer un plan y definir los objetivos y procesos necesarios para obtener los resultados de acuerdo con los requisitos del cliente y las políticas de la organización.

  • Acciones clave:

    • Identificar un problema o una oportunidad de mejora.

    • Analizar la situación actual (recopilar datos).

    • Establecer metas y objetivos claros y medibles.

    • Desarrollar teorías sobre las causas del problema.

    • Planificar cómo probar esas teorías (definir métodos, recursos, plazos y responsabilidades).

2. H - Hacer (Do)

  • Objetivo: Implementar el plan y poner en práctica los procesos.

  • Acciones clave:

    • Ejecutar el plan según lo diseñado.

    • Capacitar a las personas involucradas.

    • Realizar la prueba o el cambio en una escala pequeña o piloto (para minimizar el riesgo y el disruption).

    • Documentar todos los pasos y observaciones.

    • Recopilar datos para su posterior análisis.

3. V - Verificar (Check)

  • Objetivo: Monitorear y medir los procesos y productos respecto a las políticas, objetivos y requisitos, e informar sobre los resultados.

  • Acciones clave:

    • Comparar los datos recopilados en la fase "Hacer" con los objetivos y predicciones de la fase "Planificar".

    • Analizar los resultados para verificar si la teoría fue correcta y si se alcanzaron las metas.

    • Identificar cualquier desviación o efecto no previsto.

    • Aprender de los resultados.

4. A - Actuar (Act)

  • Objetivo: Tomar acciones para mejorar continuamente el desempeño de los procesos.

  • Acciones clave:

    • Si la prueba fue exitosa: Estandarizar el cambio, implementarlo a gran escala, actualizar procedimientos y capacitar a todos los afectados.

    • Si la prueba no fue exitosa: Analizar por qué falló, documentar las lecciones aprendidas y abandonar el cambio.

    • En ambos casos, identificar nuevas oportunidades de mejora.

    • Reiniciar el ciclo: Utilizar el conocimiento adquirido para planificar la siguiente iteración del PHVA.


Origen del Término

Aunque se le conoce mundialmente como "Ciclo de Deming" en honor al Dr. William Edwards Deming, quien lo popularizó y aplicó en Japón para su reconstrucción industrial después de la Segunda Guerra Mundial, la idea original fue concebida por su mentor, Walter A. Shewhart.

Deming prefería llamarlo "Ciclo de Shewhart" para darle crédito a su creador. En Japón se le conoce simplemente como el "Ciclo PDCA" (por sus siglas en inglés: Plan-Do-Check-Act).


Ejemplo Práctico: Mejorar el Tiempo de Entrega de un Producto

  • Planificar: Identificar que las entregas se retrasan 2 días en promedio. Analizar el proceso y descubrir que la causa es la revisión manual de pedidos. Planificar la implementación de un software automático en una sucursal de prueba.

  • Hacer: Instalar el software en la sucursal piloto y capacitar al personal. Usarlo durante un mes y registrar los tiempos de entrega.

  • Verificar: Al final del mes, se verifica que el tiempo de entrega en la sucursal piloto se redujo en 1.5 días. Se confirma que el software es efectivo, pero no alcanza la meta completa de 2 días.

  • Actuar: Se decide implementar el software en todas las sucursales. Además, se identifica que se necesita optimizar también la logística (nueva oportunidad de mejora). Se inicia un nuevo ciclo PHVA para abordar el problema de logística.

En resumen, el ciclo PHVA es la columna vertebral de la mejora continua en sistemas de gestión como ISO 9001 (Calidad), ISO 14001 (Ambiental) y en metodologías como Lean Manufacturing y Six Sigma.

Share:

miércoles, 3 de septiembre de 2025

Control de Gestión

El área de Control de Gestión (también conocido como Management Control) es una de las funciones más estratégicas y transversales dentro de una empresa. Su objetivo principal es guiar la organización hacia el cumplimiento de sus objetivos utilizando la información como herramienta fundamental.

No se trata de un control "supervisorio" o fiscalizador en el sentido negativo, sino de un proceso de apoyo a la toma de decisiones y de asegurar que los recursos se usen de forma eficiente y alineada con la estrategia.

Aquí te explico en detalle de qué trata:

1. Objetivo Central: Alinear la Operación con la Estrategia

La empresa define una visión y una estrategia a largo plazo. El Control de Gestión actúa como el "puente" que traduce esa estrategia en:

  • Objetivos concretos y medibles (para cada área, departamento e incluso individuos).

  • Indicadores de desempeño (KPIs) que permiten monitorear el progreso.

2. Funciones Principales del Área

Las actividades clave que realiza un Controller de Gestión o el departamento son:

  • Diseño e Implementación de Sistemas de Control:

    • Crear y mantener el cuadro de mando integral (Balanced Scorecard - BSC) y los KPIs.

    • Asegurar que los indicadores midan lo realmente importante y estén alineados entre áreas.

  • Planificación y Presupuestación:

    • Coordinar el proceso de presupuesto anual, trabajando con todas las áreas (Ventas, Producción, Marketing, etc.) para definir sus metas financieras y operativas.

    • Realizar pronósticos (forecasting) que actualicen las proyecciones basándose en la performance real.

  • Seguimiento y Análisis de Desviaciones:

    • Comparar los resultados reales vs. el presupuesto/pronóstico.

    • Investigar y explicar las causas de las desviaciones (¿por qué vendimos menos? ¿por qué los costos fueron mayores?).

    • Generar informes de gestión claros y oportunos para la dirección.

  • Análisis de Rentabilidad y Costos:

    • Determinar la rentabilidad de productos, servicios, clientes, canales de venta, etc.

    • Realizar análisis de variaciones de costos y proponer medidas correctivas.

  • Soporte a la Toma de Decisiones:

    • Brindar análisis de "what-if" (qué pasaría si...) para evaluar escenarios.

    • Realizar estudios de viabilidad económica de nuevos proyectos, inversiones o productos.

  • Garantizar la Calidad de la Información:

    • Trabajar estrechamente con el área de Contabilidad y Finanzas para asegurar que los datos financieros y operativos sean confiables y estén disponibles a tiempo.


3. ¿Con qué áreas interactúa?

El Control de Gestión es transversal. No le "reporta" a una área operativa, sino que typically depende de la Dirección General o Financiera (CFO). Interactúa constantemente con:

  • Alta Dirección: Para presentar reportes y apoyar la estrategia.

  • Finanzas y Contabilidad: Para obtener datos fiables.

  • Ventas y Marketing: Para analizar desempeño comercial y rentabilidad.

  • Operaciones/Producción: Para controlar costos y eficiencias.

  • Recursos Humanos: Para vincular los objetivos con la compensación variable (bonos por desempeño).


4. Perfil del Profesional (Controller de Gestión)

  • Formación: Usualmente en Administración, Contaduría, Ingeniería Comercial o Economía.

  • Habilidades Técnicas:

    • Excel avanzado (imprescindible).

    • Manejo de sistemas ERP (SAP, Oracle, etc.).

    • Power BI, Tableau u otras herramientas de Business Intelligence (BI).

    • Fuertes conocimientos contables y financieros.

  • Habilidades Blandas:

    • Comunicación efectiva: Debe saber explicar números a no financieros.

    • Pensamiento crítico y analítico: Para ir más allá del dato y entender la historia que cuenta.

    • Influencia y negociación: Para que las áreas adopten sus indicadores y recomendaciones.

    • Visión de negocio: Entender cómo funciona la empresa en su totalidad.


Analogía Sencilla: El Copiloto de un Auto de Carreras

  • El conductor (Gerente/Gestión): Es quien maneja el auto, toma las curvas y acelera. Está enfocado en la pista inmediata.

  • El copiloto (Control de Gestión): Tiene el mapa, el cronómetro y los instrumentos. Le dice al conductor: "Vamos 5 segundos más lentos que el presupuestado", "el rival detrás viene fuerte", "gasta demasiado combustible, modera la velocidad", "la próxima curva es cerrada".

El copiloto no conduce, pero proporciona la información crítica para que el conductor gane la carrera de la manera más eficiente posible.

En Resumen:

El Control de Gestión es el área que traduce la estrategia en números, monitorea el desempeño, analiza las desviaciones y proporciona información clave para que los gestores tomen decisiones informadas y la empresa cumpla sus objetivos de forma eficiente. Es un pilar fundamental para la competitividad y sostenibilidad de cualquier organización.

Share:

viernes, 29 de agosto de 2025

Jefes tipo Burns

Así como existe el arquetipo del empleado "Smithers", existe el arquetipo del "Jefe Burns" que los busca, fomenta y recompensa.

Los jefes que quieren empleados tipo Smithers son, por lo general, líderes con una profunda necesidad de control, validation y comodidad, often por encima de la eficiencia colectiva o la innovación.
Características Principales de un "Jefe Burns":

1. Necesidad de Control y Centralización del Poder:

  • Estos jefes no delegan poder real ni autoridad. Prefieren ser el único centro de decisión, por mínimo que sea el tema.

  • Un empleado Smithers no desafía este control; lo facilita, actuando como un canal o filtro que refuerza la centralización. Todo debe pasar por ellos y, en última instancia, por el jefe.

2. Egocentrismo y Narcisismo:

  • Creen firmemente que su éxito se debe únicamente a su genialidad y que los que los rodean son, en el mejor de los casos, herramientas útiles.

  • Necesitan una audiencia constante para su ego. Un Smithers les proporciona admiración, validation y lealtad incondicional, alimentando su autoimagen.

3. Inseguridad y Desconfianza Encubierta:

  • Paradójicamente, detrás de la fachada de poder, suele haber una gran inseguridad. Desconfían de las ambiciones de otros, temen que les hagan sombra o que los traicionen.

  • Un empleado Smithers es predecible y "seguro" porque demuestra constantemente que no es una amenaza para el trono. Su lealtad está probada beyond toda duda.

4. Comodidad y Pereza Delegativa:

  • Más que delegar tareas, delegan su propia comodidad. Quieren que su vida laboral (y a veces personal) sea lo más sencilla posible, sin tener que lidiar con problemas, quejas o detalles logísticos.

  • El Smithers es su "solucionador" personal, que se encarga de todo lo desagradable o tedioso, desde apagar un incendio en la fábrica hasta recordar el cumpleaños de su sobrino.

5. Estilo de Liderazgo Autocrático o Paternalista:

  • Autocrático: "Se hace lo que yo digo, cuando yo digo, porque yo lo digo". Un Smithers es el ejecutor perfecto de este mandato, sin cuestionamientos.

  • Paternalista: "Yo te protejo y cuido, y tú me demuestras lealtad total". Ven la relación como un intercambio: seguridad y proximidad al poder a cambio de sumisión y servicio.

6. Poca Tolerancia a la Disidencia o el Feedback:

  • Interpretan las críticas constructivas o las ideas diferentes como un desafío personal a su autoridad o inteligencia.

  • Rodeándose de "Smithers", se aislan en una cámara de eco donde solo escuchan lo que quieren oír, lo que puede llevar a decisiones desastrosas por falta de perspectiva real.

7. Ética Laboral Flexible:

  • Suelen tener una relación ambigua con las reglas y la ética. Las consideran aplicables a los demás, pero no necesariamente a ellos mismos.

  • Necesitan un empleado que, como Smithers, no los juzgue y esté dispuesto a mirar para otro lado o incluso a facilitar comportamientos cuestionables ("¿Encontrar un niño para que opere la planta nuclear, señor Burns? Enseguida").

¿En qué tipo de organizaciones prosperan estos jefes?

Este tipo de líder suele florecer en entornos donde:

  • La estructura es rígida y jerárquica.

  • No hay mecanismos sólidos de rendición de cuentas (accountability) hacia arriba (por ejemplo, una junta directiva débil o inexistente).

  • La cultura organizacional premia los resultados a corto plazo sin importar los medios, o valora más la antigüedad y la lealtad que la innovación y el talento.

  • Empresas familiares o muy tradicionales donde el fundador o dueño tiene un control absoluto.

Conclusión: La Relación Simbiótica Disfuncional

La relación entre un "Jefe Burns" y un "Empleado Smithers" es profundamente simbiótica pero often disfuncional para la organización:

  • El jefe obtiene: Control, validation incondicional, comodidad y un ejecutor leal.

  • El empleado obtiene: Seguridad, un sentido de propósito (servir al líder), proximidad al poder y un estatus derivado.

El gran perdedor es la organización en su conjunto, ya que este dúo:

  • Ahoga la innovación y el pensamiento crítico.

  • Desmotiva al talento que no está dispuesto a participar en este juego de lealtades.

  • Crea un punto único de fallo: si el jefe toma una mala decisión, no hay nadie a su lado que se atreva a corregirlo.

  • Fomenta una cultura de miedo y sumisión.

En esencia, un jefe que quiere empleados Smithers no está buscando un equipo de talentos diversos; está buscando una corte de adeptos que le facilite el ejercicio de su poder y alimente su ego.

Share:

Empleados estilo Waylon Smithers

La referencia a Waylon Smithers, el devoto y extremadamente leal asistente del Sr. Burns en Los Simpson, es perfecta para describir un arquetipo muy específico en el mundo laboral.

Los empleados que califican con un "desempeño al estilo Waylon Smithers" son aquellos cuya valoración y éxito dentro de la organización dependen casi exclusivamente de su lealtad absoluta y servicio incondicional a un solo líder o figura de poder, por encima de sus habilidades técnicas, la meritocracia o los intereses generales de la empresa.

No se trata necesariamente de ser incompetente (de hecho, Smithers es muy competente en su trabajo), sino de que su principal activo es esa devoción.

Características Principales de un "Empleado Smithers":

1. Lealtad Inquebrantable y Personal:

  • Su lealtad no es primariamente hacia la empresa, su misión o sus valores, sino hacia una persona específica (normalmente un jefe de alto rango, poderoso y often temido o respectado).

  • Defienden las decisiones y acciones de su líder, incluso cuando son objetivamente erróneas, poco éticas o dañinas para la organización. "El jefe siempre tiene la razón" es su lema no escrito.

2. Asistencia y Servicio Total:

  • Su rol principal es anticiparse a las necesidades y caprichos de su líder y satisfacerlos de inmediato.

  • Van mucho más allá de la descripción de su puesto. Gestionan desde asuntos laborales críticos hasta tareas personales triviales (como conseguir el café exacto o un edredón de seda para la siesta del jefe).

3. Identificación con el Poder:

  • Derivaban su estatus, influencia y sentido de importancia de su proximidad al poder, no de su propio poder o logros.

  • Se sienten validados al ser "la mano derecha" y el "canal único" para acceder al líder. Esto puede ser su principal motivación.

4. Falta de Autonomía e Iniciativa Propia:

  • Rara vez toman decisiones importantes por su cuenta o proponen ideas que se desvíen de los deseos conocidos de su líder.

  • Su iniciativa está dirigida a servir, no a innovar o desafiar el statu quo. Esperan instrucciones directas o actúan basándose en lo que creen que el jefe querría.

5. Baja Visibilidad Individual:

  • Prefieren permanecer en un segundo plano, dejando que todo el crédito y el reconocimiento recaigan en su líder.

  • Su satisfacción viene del éxito de su jefe, no del propio. Son el "hombre detrás de la cortina" que hace que todo funcione.

6. Ceguera Voluntaria ante los Defectos del Líder:

  • Son capaces de ignorar, justificar o racionalizar los comportamientos negativos, errores o falta de ética de su líder (el Sr. Burns es egoísta, mezquino y, a menudo, incompetente, pero Smithers solo ve a un "hombre de negocios brillante").

7. Vida Social y Laboral Entrelazada:

  • Su vida gira en torno a su trabajo y, específicamente, a su jefe. Tienen pocos intereses o relaciones fuera de este contexto, lo que refuerza su dependencia.

¿Dónde se suelen encontrar estos empleados?

Este arquetipo florece en organizaciones con estructuras muy jerárquicas, paternalistas o incluso autocráticas, donde:

  • El poder está muy centralizado en una sola figura.

  • La cultura del "sí señor" es recompensada más que el pensamiento crítico.

  • Existe alta politización y las lealtades personales valen más que el desempeño colectivo.

Conclusión: ¿Son valiosos?

  • Para el Líder: Son increíblemente valiosos. Son confiables, discretos y un amplificador de su propia productividad y comodidad.

  • Para la Organización: Son un riesgo y un activo a la vez.

    • Activo: Mantienen la maquinaria del líder en marcha y pueden ser extremadamente eficientes.

    • Riesgo: Su lealtad ciega puede impedir que se señalen errores cruciales. Crean un "ecosistema del sí" alrededor del líder, aislandolo de feedback real. Si el líder cae o se va, el "empleado Smithers"往往 se queda sin propósito y sin la protección que lo definía.

En resumen, un "Waylon Smithers" es la personificación de la lealtad ejecutiva llevada a su extremo, un empleado cuyo desempeño se mide por su devoción a una persona más que por los resultados objetivos para la empresa.

Share:

viernes, 25 de julio de 2025

La paradoja de la eficiencia

 Introducción

Imagina esto: Eres el empleado más eficiente de tu equipo. Cumples tus metas antes que nadie, entregas resultados impecables y nunca dejas una tarea pendiente. Tu recompensa: más trabajo. Mientras, tus colegas menos productivos siguen su ritmo, sin presión adicional.

Esta no es una ficción: es la cruda realidad que revela un estudio de la Universidad de Duke, publicado en el Journal of Personality and Social Psychology. Y explica por qué muchos talentos terminan quemados o renunciando, no por falta de capacidad, sino por exceso de injusticia.


El fenómeno: "Castigamos la eficiencia"

La investigación descubrió que:

  • Los jefes asignan hasta un 20% más de carga laboral a los empleados más productivos.

  • La lógica (fallida): "Si lo hace rápido y bien, puede con más".

  • El resultado: Estrés, desmotivación y rotación de los mejores talentos.

Dato clave: El 68% de los trabajadores eficientes considera injusta esta dinámica (y con razón).


¿Por qué sucede esto?

  1. Sesgo del "buen soldado": Se confunde disponibilidad con capacidad ilimitada.

  2. Falta de métricas claras: No se mide el esfuerzo invisible (gestión de carga mental, horas extras no pagadas).

  3. Cultura del "premio tóxico": Equivocar reconocimiento con explotación ("Te doy más trabajo porque confío en ti").


Consecuencias para las empresas

  • Pérdida de talento clave: Los empleados eficientes son los primeros en irse cuando encuentran entornos más justos.

  • Clima laboral envenenado: Resentimiento entre equipos y percepción de favoritismo.

  • Productividad ficticia: A corto plazo se cumple; a largo plazo, se colapsa.


Cómo romper el ciclo (soluciones prácticas)

Para líderes y equipos de RH:

  1. Recompensar, no sobrecargar: Bonos, flexibilidad o desarrollo profesional (no tareas extras).

  2. Distribuir cargas equitativamente: Usar herramientas como matrices de capacidad para asignar trabajo.

  3. Escuchar activamente: Encuestas anónimas sobre carga laboral percibida.

  4. Celebrar el "no" saludable: Empoderar a los empleados para fijar límites sin culpa.


Reflexión final: Justicia sobre eficiencia

El estudio de Duke nos deja una lección incómoda: Las organizaciones que premian la eficiencia con explotación están cavando su propia tumba. El futuro del trabajo exige:

  • Líderes que protejan a sus talentos, no que los consuman.

  • Culturas que midan el bienestar, no solo la productividad.

"Si quieres retener a los mejores, deja de castigarlos por serlo".



TRANSCRIPCIÓN DEL ARTÍCULO:

AMBIENTE LABORAL

NO PAGA SER EFICIENTE

Las personas que rinden en su trabajo son propensas a terminar sofocadas por su propia eficiencia. Un estudio de la Facultad de Negocios de la Universidad de Duke, en Estados Unidos, encontró que los jefes les imponen más carga laboral a quienes hacen bien su trabajo, lo que hace que se sientan más agobiados en comparación con los menos productivos. Debido a que estos trabajadores tienden a cumplir sus metas a corto plazo en un menor tiempo, dejan su trabajo porque no consideran justo que les pongan más carga que a los demás.

Para no perder estos buenos trabajadores, los expertos recomiendan a los jefes que a los más productivos les reconozcan sus esfuerzos y no los premien con más labores.

El trabajo apareció en Journal of Personality and Social Psychology. 

Share:

Posts Populares

Archivos del Blog

Con tecnología de Blogger.